Es posible utilizarlas para convertir un cilindro en un sólido cerrado, por ejemplo. Extraiga la curva de límite en cada extremo del cilindro y construya una superficie de recubrimiento o tapa con cada una. Es posible crear sólidos cerrados a partir de extrusiones, barridos y revoluciones.
La posibilidad de tener varias curvas en la superficie de recubrimiento o tapa permite anidar curvas dentro de otras curvas. En función de la dirección de la curva, es posible incluir cortes y superficies sin cortes en una operación. En el siguiente ejemplo, la parte gris del patrón de ojo de buey contiene superficies, mientras que los anillos sin colorear no las tienen. Utilice Vista previa para que las direcciones de las curvas sean las correctas antes de cerrar el cuadro de diálogo.
Las superficies de recubrimiento o tapa pueden ser exactas o aproximadas en función de su configuración.
Las superficies de recubrimiento o tapa crean una superficie para cubrir un «extremo abierto» de otra superficie o superficies. Se recomienda que la(s) superficie(s) que se va a tapar forme una superficie cerrada en sí misma, o cuando se consideren un grupo. Aunque es posible tapar superficies abiertas, se dibuja una línea recta entre los puntos abiertos de la superficie, y pueden generarse superficies erróneas en los lugares que los puntos finales hacen que la línea de cierre cruce el límite de la superficie.